Se denomina kéfir tanto a los gránulos con los que se fermenta la leche como al producto resultante. El kéfir es conocido como un producto lácteo parecido al yogurt líquido, posee bacterias y levaduras probióticas que aporta grandes beneficios a nuestro organismo ayudando a mantener la salud en general.
La producción del kéfir se asemeja a la producción del yogurt, existen dos tipos de kéfir: el kéfir de agua y el kéfir de leche. Contienen las mismas propiedades, pero se adaptan a medios distintos.
En el Programa Fitness Inconsciente te facilitamos el trabajo a la hora de diseñar tu menú de alimentación, calcular macronutrientes y planificar un plan de entrenamiento de hipertrofia. Accede al Programa Fitness Inconsciente y consigue resultados por un bajo costo.
Origen del kéfir.
El kéfir es originario de Europa y Asia, su nombre proviene de la traducción de la palabra turca “keyif” que significa “sentirse bien” o “sabor agradable”. El aspecto del kéfir es similar al del coliflor, son unos granos de color blanco formados por cultivos de levadura y bacterias lácticas.
Propiedades del kéfir.
Todo dependerá de la cantidad de kéfir que hagas y la calidad de la leche también, pero en general aporta calcio, fósforo, vitamina B2, vitamina B12, magnesio, hidratos de carbono, proteína, grasa (según el tipo de leche), vitamina D, calorías (dependiendo de la cantidad de leche) y compuestos bioactivos como ácidos orgánicos y péptidos, aminoácidos esenciales como el triptófano y proteínas de fácil digestión.
▷ Aprende más sobre rutinas de ejercicios para aumentar masa muscular en mujeres y hombres
Beneficios del kéfir.
Facilita la digestión debido a que regenera la flora intestinal, eliminando los problemas de estreñimiento y por ello se usa para el tratamiento de cualquier enfermedad inflamatoria intestinal; como colitis, úlceras, gastritis.
Es un fuerte antibiótico y antialergico natural.
Es un buen tratamiento para enfermedades como artritis, cáncer de colon, enfermedades pulmonares, hepatitis, cálculos renales, piedras de la vesícula y hasta el acné ya que posee propiedades antioxidantes y anti envejecimiento.
▷ Estas son 5 dietas para perder grasa mientras te ejercitas
Limpia el cuerpo haciendo un efecto “detox”, mejora el metabolismo y regula los niveles de glucosa en sangre.
Mejora la atención, concentración, y es un buen tratamiento para los trastornos de sueño.
El kéfir de leche y el kéfir de agua.
Aunque las propiedades que brinda son las mismas, lo cierto es que tienen muchas diferencias, comenzando por su aspecto.
En el caso del kéfir de leche su estructura adopta la forma de una masa gelatinosa, color blanca y a veces ligeramente amarillenta que tiene un aspecto similar al coliflor, mientras que el kéfir de agua es transparente y a veces ligeramente amarillento, tiene una forma similar al de un grano de arroz.
▷ Conoce la importancia de la suplementación proteica en el deporte
Esto se debe a que la fermentación de cada uno se hace de forma distinta, mientras que en el kéfir de leche es doble, de forma ácido-láctica y alcohólica debido a la asociación simbiótica de bacterias y la levadura, en el kéfir de agua se fermenta con tibicos que son son una mezcla de bacterias y levaduras que se encuentran en una matriz de polisacáridos creada por bacterias.
Preparación del kéfir de leche.
- kéfir, la cantidad de tu preferencia.
- leche de vaca o de cabra, la cantidad de tu preferencia.
Se añaden los granos del kéfir a la leche vaca o de cabra (puede ser la leche fresca, pasteurizada o no, descremada, semidescremada o completa). A continuación los microorganismos actúan fermentando los azúcares de la leche por aproximadamente 24 horas.
Luego de pasadas las 24 horas ya estará preparada la bebida kéfir. Posteriormente se retiran los granos del kéfir con un colador, esto para usarlos nuevamente y obtener más producto.
▷ Aprende a construir un plan de alimentación saludable
Al finalizar su preparación ya estará listo para ser consumido, y puedes mantenerlo en tu refrigerador para su consumo posterior.
Preparación del kéfir de agua.
- kéfir, la cantidad de tu preferencia.
- azúcar morena.
- agua.
El kéfir de agua no necesita lactosa para producir su fermentación, por ello se añade azúcar morena y agua. Es una gran opción para personas que son vegetarianas o intolerantes a la lactosa.
Coloca el agua en un recipiente, a continuación añadir los granos del kéfir y el azúcar morena, tapa el recipiente con un paño, ponle una banda elástica para que el paño no se caiga, y agítalo. Mantenlo en temperatura ambiente durante 2 o 3 días.
Luego, al igual que en el kéfir de leche, debes retirar los granos con un colador, y ya estará listo para consumirlo o si gustas refrigerarlo para su consumo posterior.
▷ Utiliza esta guía para aprender a ganar masa muscular desde casa
ES IMPORTANTE QUE SEPAS…
Los utensilios o recipientes usados en la preparación del kéfir no deben ser de material aluminio, ya que no es estable en un medio ácido y podría transferir al producto partículas nocivas.
No debe consumirse kéfir ni antes ni después de tomar algún medicamento como bifosfonato, fluoruros o tetraciclinas, ya que en ocasiones puede interferir en la absorción del medicamento.
El kéfir no es una cura para el cáncer, así que se debe evitar su consumo si el cáncer está avanzado y más que todo si es gastrointestinal.
Debido a que en su fermentación el kéfir produce una pequeña parte de alcohol, se debe evitar el consumo si se padece de alguna enfermedad del hígado.
El kéfir no se debe consumir de forma excesiva, ya que aunque parezca una bebida milagrosa, lo cierto es que puede ser perjudicial y causar dolor abdominal y diarrea. Por eso lo recomendable es que NO se consuma más de 1 vaso de kéfir al día.
0 comentarios